Sonará a reivindicación perrofláutica...
Es una demanda de nuestras contradictorias y destructivas izquierdas , pero es de sentido común.
Legalizar y regular las drogas y la prostitución - aún en manos tan torpes como la de nuestros lamentables gobiernos - es un paso hacia delante, se mire como se se mire. Una necesidad, diría yo.
Acabar con el tráfico de estupefacientes y de personas, terminar con la prostitución, es un objetivo que no se consigue nunca.
Puede ser un objetivo imposible o puede ser que "no se quiere terminar con ellas" por diversas razones nada edificantes, el caso es que hay oferta (mafias varias que se hacen más poderosas cada día) y el caso es que hay demanda (cientos de miles de consumidores - o millones - tienen ambos mercados).
Todo ello en ilegal, en negro, sin garantías, sin fiscalidad y sin control. Con todos los riesgos y perjuicios para la sociedad y ningún beneficio.
Se deben legalizar y regular. Nunca ha sido mejor ocasión que ahora, tan necesitado el Estado de ingresos.
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